lunes, 3 de agosto de 2015

Construyendo una iglesia


Este sábado pasado hicimos algo diferente. La hermana Felipa sscc nos llevó a la comunidad que anima. Para entendernos, una parroquia suele tener muchas comunidades. La nuestra tiene 19 y cada una de ellas se reúne en su zona: catequesis, proyectos, celebración de la eucaristía (o, en la mayor parte de los casos, una celebración de la palabra por no poder atender los sacerdotes a todas ellas todos los domingos). La comunidad del Beato Eustáquio se reúne para compartir su fe aquí:




Desde hace un año se reúnen varios parroquianos voluntarios para construir su iglesia al estilo medieval. Es la primera comunidad que está pudiéndolo hacer sin que la parroquia ayude (no podría). Y a eso fuimos.

Llegamos bien pronto. Tan pronto que fuimos los primeros. Nos temíamos que no apareciera nadie. Pero poco a poco fueron llegando. Al principio con pocas herramientas, así que muchos nos estuvimos dedicando a "hacer de españoles": muchos miran y dicen cómo debería hacerse (por supuesto que lo que se hace está mal) mientras uno o dos se desloman.

Pero como pasa muchas veces por aquí, de repente se multiplican las cosas. Es claro que la capacidad de compartir está muy arraigada por el Sur del Sur. A más herramientas, más trabajo. Al final, acabamos todos muuuuy cansados.





Para los que no lo sepan (como nosotros) en las imágenes se aprecia claramente que estuvimos encofrando. Hicimos parte de los cimientos de la futura torre-campanario de la Iglesia.

Y tras el trabajo... descansamos un poco en los cimientos de la nave principal que ya está construida.

Y como todo encuentro que se precie por estos lares, la comunidad nos invitó a comer. Para la ocasión cocinaron arroz  blanco, shima de milho (una pasta hecha con harina de maíz), varios pollos frescos-frescos (matados allí mismo), pescao vermelho (rojo) en salsa y verduras rebozadas. Quizá fue por el cansancio, pero estaba todo buenísimo.

Bueno... todo, todo. Una de nuestras Marías (son 3) decidió no comer pollo tras presenciar cómo las gallinas se convirtieron en pollos.

[Añadiré foto de la comida en breve]

Sin descanso alguno, fuimos a la "Lar Mamana wa Kurula". Estuvimos con las niñas un buen rato. La intención era hacer algunas manualidades con ellas, pero ellas prefirieron bailar, cantar, jugar y hacer trenzas a todo aquel que tuviera pelo suficientemente largo. Fue un día intenso y bonito.







pd. Pensándolo bien no sé si construimos una iglesia (apenas levantamos un palmo de los cimientos de la torre) o si construimos Iglesia. 

4 comentarios:

  1. Salvador4/8/15, 7:45

    Bella y explícita metáfora de una Iglesia joven que se construye día a día con el esfuerzo y trabajo de todos. Nadie es imprescindible: sólo Dios, pero todos son necesarios.

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  2. Un beso de la abuela de María, la del pollo, que, Gracias a Dios, ya va caminando de nuevo, por la vida y por los pasillos de la casa. Quisiera ella estar allí y ayudaros en todo lo que sus noventa años le permitan. Ella reza tooodos los días por vosotros.

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  3. Hola seño Loreto, soy clara cisnero.
    Me estoy leyendo el diario que estáis haciendo.
    Ha sido un placer ayudaros al comprar las pulseras.
    Que chulo deve de ser visitar África!!!!!!!!!!!

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  4. Bello final de tan interesante entrada, Alberto: construir iglesia...Seguid en ello, y seguid compartiéndolo, que nos hace sentiros más cerca a ell@s y a vosotr@s. Gracias

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